Juan Carlos Santos-Olmedilla (Filósofo.Deshidratación leve y desorientación)

Yo no la vi. En ningún momento. Lo que no excluye que no haya existido, ojo, eso por delante, como cuando te dicen que ha habido un terrible tornado en Kansas, tú no lo viste, pero el tornado existió, pues así fue en este caso. Marinita Losada fue la que me dijo Juancar por Dios que está aquí que está aquí ven conmigo que no nos puede ver, y claro, yo me fui con ella, porque conozco a Marinita desde el Pleistoceno, bueno ya me entiende, desde tiempos inmemoriales, y nunca me ha dicho nada que sea mentira, que yo sepa, a lo mejor alguna vez sí, y como no estaba yo presente nunca podré decir lo contrario…yyyy…cuál fue su pregunta?, ah, eso, pues nada, me invitaron a formar parte del  Encuentro-Congreso “ Sentirse Bien como Forma de Vida. Despreocupación y Libertad en el hoy” y como ya sabía que iban a asistir varios amigos, dije que sí…que por qué Lavinia no nos podía ver? Eso tendrá usted que preguntárselo a Marinita, yo con Lavinia nunca he tenido ningún problema serio, digamos, y si me ve o no ya es cuestión de perspectivas, percepciones y dioptrías o cosas por el estilo, Marinita entonces me dijo de adentrarnos por un caminito que salía del jardín donde estábamos tomando el aperitivo previo a la primera Mesa Redonda, que no era redonda ni mesa…eran unos sillones bien colocados bajo un toldo, o eso me pareció a mí..es que sabe usted? Ya hacía mucho calor…el caso es que Marinita y yo nos fuimos por ese caminito, y usted no se hace una idea de lo alto que puede cantar una cigarra, y si fuera una sola, pero debían ser miles, y Marinita, por algún motivo, decidió ir hacia lo alto para encontrar otra vez el camino de vuelta y fue cuando la perdí, porque todo comenzó a irisarse y a darme igual y lo último que recuerdo fue acordarme de los Tuareg, no sé porqué, porque como usted puede apreciar este no es paraje para camellos.

Vicente Torralba (Director de Cine y Productor. Hipotermia, heridas superficiales, síntomas de shock-postraumático y desorientación)

La avispa es un insecto. Eso que quede claro, no un animal, como leí en algún lado. Vale que son una especie protegida, y esas cosas, me pregunto yo que protegidas de qué exactamente, porque hasta nadar saben las puñeteras, sabes?…sí, las avispas nadan. Así que no sé de qué hay que protegerlas. Se supone que si matas una te puede caer una multa, o algo así, pues la pago, sabes? Porque vamos a ver, no es lo mismo decir “Fulanito no mataría ni una mosca” que “Fulanito no mataría ni una avispa”, entendámonos, una mosca puede hacerte la vida imposible un rato, pero se va y punto, y la matas o no, depende de lo que te toque los cojones. A la avispa la acabas matando, y encima si a la cabrona le da la gana te pica antes de palmar…vamos a ver..hay alguna película de Disney en la que la protagonista sea una avispa? Nones..o en su defecto…que esté como personaje secundario y sea de los buenos? Nones. Pues ahí está. Cuando se acabe el mundo, el único ser que sobrevivirá será la avispa, te lo digo yo. Es que son parte esencial del ecosistema…MIS COJONES. Así te lo digo. Qué cómo se llegó a esta situación?…Situación…the situation..que se dice en inglés no?….os importaría darme otra taza del chocolate caliente este tan delicioso? Se consigue en todas partes o os lo dan a vosotros por ser quien sois?…ya…pues ahora mismo hasta me haría socio mayoritario de la empresa, te lo juro. The Situation…eso. A mi me llama Hoyos, y me dice que me quieren para dar una charla sobre la libertad, y ser feliz, y esas cosas, y yo lo primero le pregunté si era AllInclusive y con dietas, y él me dijo que por supuesto…qué?, gratis no voy a ningún sitio, sólo a casa de mis padres, por supuesto, sólo faltaría…y a saraos privados en petit-comité..pero vamos…gratis y porque sí a ningún sitio. Entonces, Susi y yo vinimos hasta aquí, que no es moco de pavo porque el chofer se perdió tres veces. Todo bien, hasta que estamos en el vermut ese que sirven antes de que empiece la historia…y hete ahí que veo aparecer a Lavinia por el fondo y digo trágame tierra, Susi al menos tenía el abanico para taparse, pero yo estaba a campo abierto, por así decirlo, y le dije a Susi de meternos detrás de unos árboles frondosos…que por qué no me podía ver Lavinia? Pues mira, ya puestos, lo voy a decir y me libero más de lo que ya estoy…liberado, eso es, estoy Liberado..Liberateeee que dice la canción pues yo ya estoy a full de liberado hoy…cómo dices? Si ya….yo a Lavinia le hice una putada, sip, una putada de manual… con un documental sobre su vida como artista, iba a ir sobre su vida diaria, su creatividad, un poco su pasado, unos de esos documentales que se hacen sobre gente… ya estaba todo apalabrado y preparado, y en resumidas cuentas la dejé colgada, no lo hice y di la callada por respuesta…lo peor no es eso, sino que ella ya había invertido pasta y la perdió, porque no se la devolví para invertirla en otro proyecto…una Putada, así con mayúsculas, pero como yo soy quien soy no pasó nada, y ella después de un tiempo desapareció, literalmente, hasta hoy…y claro..cómo dices? No es que no te atienda…es que mis oidos son agua…qué poético estoy oye…esto es sólo chocolate en polvo?…en serio?…pues eso, que le dije a Susi de meternos detrás de unos árboles frondosos hasta que se fuese, o algo, pero la tía firme allí…además como que brillaba, o eso me pareció a mí…porque el calor que hacía no era normal y yo ya llevaba dos birras heladas…todo influye…pero brillaba fijo…y ni abanico ni mierdas, detrás de los arbustos nos faltaba la vida…así que decidimos irnos más allá…qué? No..más allá de los árboles, no al otro barrio..eso vino después…porque entonces seguimos una senda sombría, muy agradable, como un túnel…y como todo túnel, tiene su fin…y fuimos a dar a una mar de arbustos en flor..que aunque me mates ahora mismo no sabría cuál…y ya allí empezó el zumbido, un zumbido atronador…como de guerra psicológica, tú ya me entiendes, que no puedes pensar….y empezó Pearl Harbour, te lo juro..porque yo PearlHarbour me lo imagino así…nubes y nubes de avispas cabreadas en vuelos rasantes dispuestas a matar todo aquello que respire…y ya ni vuelta al túnel ni nada…sólo sabes correr, gritar y tratar de derribar al enemigo a manotazos de alguna forma…y corrimos a ciegas…tan a ciegas que no nos dimos cuenta del precipicio…y allá saltamos…te juro que esa sensación de verme en el aire cayendo al vacío fue un pico de adrenalina tal que estoy convencido de que por un microsegundo mi corazón se paró….CLONK…quieto parao…y luego viene el grito supongo, porque yo no recuerdo gritar…sólo ver que abajo había un río  al que me acercaba a velocidad laser…y no me pasó mi vida ante mis ojos, ni me acordé de nadie en especial, ni lloré….yo solo pensé OSTIA SI NO TIENE CAUDAL OSTIA SI NO TIENE CAUDAL…y cerré los ojos…cerré los ojos para no ver la muerte tan de cerca…yo estoy sembrao hoy o esto no es chocolate en todos los días de su vida…ya…tú dirás misa…pero yo tengo un Flow fuera de lo normal…y…me clavé en el frío más helador jamás sentido por cojón alguno en su puta vida…y entonces vi a Susi..y pensé joder tío, joder…que ha saltado contigo joder…y me di cuenta de muchas cosas…como que me cuadró un puzle mental o algo así…porque saltó conmigo con todo su coño….en plan hasta el fin…y lo entendí todo…TODO…..pero no se lo pude decir porque nos llevó la corriente cada uno por un lado….que en las películas se ve super easy, y tienes los stunts, y todo el show…pero otra cosa es verte a merced de la puta fuerza del agua mientras esquivas rocas como montes…y entonces me encontré con los que iban haciendo rafting…..y uno que iba en las balsas me agarró como pudo…Susi se subió a otra…se subió tío…SE SUBIÓ…es que yo como no lo supe ver?…y aquí estamos…cómo dices? En serio? Un tipo con un dron lo filmó todo de principio a fin y somos virales…lo que no me pase a mí hoy…y quién es él? Y a qué dedica el tiempo libre? Pues a volar drones Vicente piensa un poco…esto no es chocolate, a mi puedes decírmelo, no se lo voy a contar a nadie…a casa de Dron, a casa de Dron, nos vamos a casa de Dron…podría tocarle a cualquiera diez boleros….a qué olerá la luna?

Marina Losada Linares (Publicista y Editora. Deshidratación leve. Ansiedad, confusión y esguince de tobillo)

El Niño Jesús de Praga es clavado a mi. No me mires así, no en estos momentos precisamente…cuando era niña, siempre me lo dice mi madre, Marinita tú eras igual al Niño Jesús de Praga, que dime tú a cuál se refiere, porque hay varios y que yo sepa mamá nunca ha estado en Praga, yo creo que tenía una estampa o algo así, da igual. Pero yo ahora estoy ofrecida a él y tengo que ir a donde quiera que se encuentre a ponerle flores, hacerle una misa o cantarle algo…bueno, cantarle no, porque voz lo que se dice voz no tengo, pero flores sí, así unas flores monas en una cestita..plin..me he ofrecido yo misma, así, sin más, porque a algo tenía que aferrarme digo yo…qué Situación? No te entiendo o hablas en código, una de dos…qué cómo llegué yo a esa Situación quieres decir?….pues verás, por mi culpa, sólo mi culpa, mi Santísima Culpa que se decía antes en el catecismo, que más que Culpa lo mío es una especie de losa en forma de persona, y esa persona es Lavinia Fuertes porque lo que le hice no tiene nombre…bueno sí, lo tiene, se llama Traición, con mayúsculas. Ella y Eladio tenían ya la fecha y la boda montada, y va y Eladio y yo nos fugamos juntos a Óbidos…qué? Sí, el Óbidos de Portugal, no es un lugar de fuga con glamour pero en aquel momento nos pareció genial…hasta ahí puede pasar la cosa, pero no contentos con eso, eh? Eladio escribe una novela contando los pormenores de su relación con ella sin dejar detalle, cambiando nombre y escenarios, pero blanco y en botella leche…y yo se la edito, y para más inri es un superventas y gana todos los premios habidos y por haber, highlife with confetti!…a costa de airear la intimidad de la que una vez fue mi mejor amiga….esta limonada qué lleva? Me recuerda a la que hacen los Usacos…perdona?…los Usacos, son los habitantes de USA…yo les llamo así..porque americanos son todos…pero esta limonada lleva algo más…bueno en fin….no sé que te estaba contando…ah, ya…pues la cosa es que yo la veo aparecer y sólo quería irme de allí, irme, irme, irme…y le dije a JuanCar vámonos de aquí antes que nos vea, y como JuanCar hace lo que yo le digo desde que coincidimos en la clase de la Srita. Remedios pues nos fuimos…y con el apuro del momento pues JuanCar perdió el rumbo, y de repente ya no estaba a mi lado…Ya no me cantes cigarra, que acabe tu sonsonete, que tu canto aquí en el alma como un puñal se me mete, sabiendo que con tu caaaaanto pregonando vas la muerte…ya lo sé que no tengo voz, pero un buen mariachi me pirra…oye y si le llevo un mariachi al Niño Jesús de Praga a Praga?…que son praguenses o pragueros…esta limonada está riquísima…y eso, que el Reino Cigarra se echó sobre nosotros como en Egipto pero aquí en este lugar recóndito…en fin…y a mí no se me ocurre otra cosa que ir hacia arriba, como en las películas de terror, sabes?…que si te fijas huyen todos escaleras arriba, en lugar de hacia fuera…pues yo igual, yo subí monte arriba con sandalias descalzas, claramente estaba histérica o algo…y claro, me torcí el pie…me caí y como pude me senté dentro de lo que parecía un metido en una roca…y fue cuando empecé a sentir como un especie de bufido que venía del fondo…era Triska…la osa..que se llama Triska….que salió un momento para ver que coño pasaba y se quedó de piedra, claro, como yo…y ni pa lante ni pa tras…de hito en hito ella y yo…fue cuando me encomendé al de Praga…y como pude marqué el teléfono de emergencias…porque tan arriba fui que hasta cobertura había..la chica muy amable, Jennifer, pero la llaman Jenny…y fue la que llamó al Seprona, que fíjate tú existe, como Teruel…siempre se habla del Seprona, el Seprona, pero una nunca lo ve, no? O tú ves a los del Seprona todos los días?…yo no…pues existe, no es un ente…es gente…dame otro vaso de limonada que algo tiene que se me escapa…y gin no es…claramente….resumiendo que cuando vi aparecer a Toni con el fusil, ya me puse en lo peor…pero era para dormir a Triska que no me quitaba ojo…y Pum, yo creo que la pobre va a pensar que tuvo una pesadilla…después me dijeron que era un tanto mansa y que tuve suerte que no tenía cría….yo una cosa te digo, entre que me encomendé al de Praga, mirar fijamente durante horas a Triska a los ojos y el calor yo creo que entré en trance y aún sigo…ya sé, gengibre, tiene gengibre..no…pues entonces no sé…Poeta de puerta adentro, espectadora dormida, nadando sola en el río, nada pasa en tu vida, cigarra, canta cigarraaaa, que ya está llegando el díaaaaEsta era de la Ostiz….será una señal?

(Nota de Prensa: Los organizadores del “Encuentro-Congreso:Sentirse Bien como Forma de Vida. Despreocupación y Libertad en el Hoy” lamentan informar de la cancelación del evento debido a causas de Fuerza Mayor. A todas aquellas personas que ya hubieran pagado por asistir, se les ofrecerán dos opciones, bien recibir el dinero de vuelta o invertirlo en un cheque-regalo que les permitirá disfrutar de una estadía de dos días en la Abadía-Parador en la que iba a celebrarse. Se desconoce todavía el alcance y gravedad de la situación, que ha movilizado medios policiales aéreos y terrestres, además de gran cobertura mediática debido a los numerosos nombres conocidos que se encontraban en el lugar. Se espera que, en breve, una rueda de prensa arroje más luz sobre lo sucedido. )

Mariola Sánchez Frías no tenía que ponerse. Eso es lo primero que le había venido a la cabeza cuando había recibido de manos de su amiga Reyes la invitación para su boda hacía ya varios meses, y seguía en la misma. Entre unas cosas y otras, no había encontrado un momento para ir a buscar un vestido aceptable que llevar, así que se había decidido por hacer una incursión en el armario de su abuela, que siempre había tenido mucho gusto a la hora de escoger su ropa, y a la que no le iba importar ya si le cogía prestado algo para salvar la situación. Se decidió por el modelo que su abuela había llevado como madrina de la boda de uno de sus hijos, hacía más de cuarenta años. Un vestido largo en tul gris perla, de  holgada manga corta y escote bandeja, perlado de diminutos cristalitos que brillaban según les diese la luz. Al ser largo nadie se daría cuenta de que llevaba unas sandalias de tacón, ya muy puestas, pero muy cómodas. No se complicó con el pelo, y se hizo un recogido muy apañado, que solventó colocándose una flor parecida a una hortensia de un antiguo tocado a un lado de la cabeza. Cartera negra de mercadillo, que daba el pego y en la que cabían muchas cosas, y salió de su casa dispuesta a no abrasarse de calor. Había recibido la noticia de la boda de Reyes con alivio, ya que su amiga y FranLuís, su futuro marido, hasta ese día habían sostenido un noviazgo agónico de doce años. Agónico para Mariola. Para Reyes y FranLuís había sido un noviazgo muy normal, sin altos ni bajos, ni pausas o alejamientos. Y hoy por fin se casaban. Sonrió al recordar el día en el que le había propuesto a FranLuís que se llevase a Reyes a Las Vegas, para hacer algo diferente, y FranLuís había entendido Las Vegas del Rey Sancho, una localidad cercana, y le dijo que era un sitio muy a desmano, la iglesia era horrible y no había local para tanta gente, y ella le había dado la razón. Elvis has left the building, definitivamente. La cuesta que llevaba a la Abadía-Parador en el Alto de las Gatas, era muy apreciada por aquellos amantes del deporte a los que les gustaba correr y escalar al mismo tiempo. Mariola no pertenecía a este grupo de personas, así que encaró la cuesta con calma y por la sombra, ya que había salido con tiempo de sobra, y no tenía prisa. Llegó al final de la cuesta, sin apenas haber sudado y con resuello, lo que le confirmó que las clases de Tai-Chi estaban dando su fruto. Muy bien, PequeñoSaltamontes, pensó, antes de meterse por una de las entradas laterales de la Abadía. La recibió un jardín en sombra, gracias a infinidad de toldos color caldero extendidos del muro hasta las ramas de los árboles, presidido por una especie de palco con sillones y butacas, lo que no dejó de sorprenderla ya que no se podía imaginar qué harían Reyes y FranLuís allá arriba, pero se encogió de hombros y miró en derredor para ver si encontraba a alguien conocido. El jardín estaba bien concurrido, por gente vestida un tanto informal para una boda, pero pensó que era disculpable debido al calor, un camarero se le acercó con una bandeja con cervezas Coronita casi heladas, y ella se hizo con una, para después mezclarse entre la gente, todavía buscando un rostro amigo o al menos conocido. Se cruzó con un hombre que era clavado al presentador del Telediario  de las tres de la Primera, que la saludó tan afectuosamente  que a ella le dio un poco de vergüenza no saber quién era, acto seguido una mujer que le sonaba de haberla visto en algún sitio, pero no supo dilucir  dónde, pasó por su lado, y apoyando una de sus manos en su hombro le dijo al oído algo parecido a “Benditos los Ojos” con una sonrisa radiante, para después perderse entre la gente, lo que llevó a Mariola a pensar que debían ser parientes que tenía FranLuís en Murcia. Entonces alguien llamó a gritos a una tal Lavinia, y muchos se volvieron hacia ella, y ella también se volvió, pero quien quiera que fuese la tal Lavinia no hizo visos de saludar. Continuó su garbeo, hasta llegar a una mesa con entremeses, y se decidió por un trozo de Empanada Gallega, que le supo a gloria y que le hizo caer en la cuenta del hambre que tenía. Empezó a sospechar que algo no cuadraba cuando vio aparecer al Ministro de Fomento, y supo que era él porque ella trabajaba como administrativa en una empresa constructora de la zona, y día sí, y día también les llegaban fotos de las hazañas de ese hombre a lo largo y ancho del país. Y no era pariente ni de Reyes ni de FranLuís. Entonces supo que estaba en la película equivocada. Como quien no quiere la cosa, fue buscando la manera de desparecer del mapa, y lo consiguió a través de una puerta que había tras el palco, que la llevó al interior del Parador. No tuvo que dar muchas vueltas hasta toparse con un grupo de gente conocida, que se dirigía a la capilla. Y allí, en la capilla, justo al lado de la sacristía, Mariola Sánchez Frías conoció a Bombardino Manteiga López, con quien descubriría lo bien que se lo puede pasar una bailando un pasodoble, que si dos ríen juntos están menos solos y que Las Vegas, por la noche, desde el aire, es azul.

A Lavinia Fuertes le gustaba bajar en bicicleta desde Gaiberg a Bammental. Solía ir al menos dos días a la semana, a hacer alguna compra pequeña y a correos. Si no, la gran parte de su tiempo lo pasaba en Gaiberg donde tenía todo lo necesario para ser feliz. Loris y ella se habían comprado una antigua granja, y la habían restaurado con tiempo y mimo. En una parte Loris tenía su consulta de veterinario especializado en caballos, y en la otra tenían su vivienda que compartían con sus dos hijos, tres gatos, y todos los Border Collies que tenían en su criadero. Actualmente diez. Además, Lavinia, dos veces por semana, impartía clases gratuitas de cerámica en el local de la Asociación de Mujeres. En lo que antes había sido un granero, ahora transformado en atelier, seguía creando maravillosas y únicas esculturas, que siempre tenían el mismo comprador: Richard Michael Johnston III, un barón tejano del petroleo, que desde que había visto una de sus esculturas en una exposición, había hecho todo lo posible para conseguir un contrato exclusivo con ella, de forma que todas las esculturas que ella crease serían de él, sin importar precio ni tamaño. A Lavinia Fuertes le gustaba montar a caballo con Loris y los niños, y llegar por el bosque hasta el Weiβer Stein, los días que estaba abierta la cabaña-taberna tomaban un refresco y un tentempié antes de emprender la vuelta. A Lavinia Torres le gustaba hablar con Loris, envueltos en la oscuridad, mirando las luces encenderse y apagarse en el valle ante ellos, disfrutando del crepitar de la noche, de los trenes en la distancia, y la calma. Esa inmensa calma.